Y como narrar un
raro día de Halloween en el que los días de felicidad se convirtieron en días neutros.

En la calle, tu y yo
siempre al lado, siempre como novios. Y la persona que es como mi hermana,
intentando emborracharnos a ti y a mí. Ninguno quería, pero ella buscaba la
forma de hacerlo. Un sorbo tú y otro yo, y solo para verme beber tu bebías. Pero
por suerte, no pasó nada.
Y esperando en la
parada del bus, viéndote sentado en la acera y echando de menos nuestro amor.
Y en la casa, nos
tocaba dormir juntos a los dos en la misma cama. Pero tu preferías en el sofá de
al lado porque se estaba más cómodo. Pero me da igual, Porque te quiero y solo
quiero que seas feliz.
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